miércoles, 18 de abril de 2007

Acuerdo Programatico de la Coalicion Civica de la Ciudad de Buenos Aires


ACUERDO PROGRAMÁTICO
PARA LA CIUDAD DE BUENOS AIRES
Introducción
El Acuerdo Programático de la Coalición Cívica de la Ciudad de Buenos Aires está enmarcado por el acuerdo de gestión y gobierno suscripto por el candidato a Vice-Jefe de Gobierno por la Coalición Cívica Enrique Olivera con el candidato a Jefe de Gobierno Jorge Telerman que con el nombre "Autonomía por Buenos Aires" se transcribe a continuación:
AUTONOMÍA POR BUENOS AIRES
Un camino solidario hacia una Ciudad autónoma, justa, abierta, audaz y solidaria. Autonomía por Buenos Aires es una propuesta amplia y republicana que trasciende las barreras de la política tradicional. Un programa que reúne espacios diversos y plurales, enriquecidos con la amplia participación de la sociedad civil. Autonomía por Buenos Aires promueve una apuesta al futuro, una convocatoria al voto popular capaz de transformar definitivamente la ciudad de Buenos Aires en un espacio de esperanza, oportunidades y realizaciones.
En Autonomía por Buenos Aires sostenemos valores, éticas y culturas semejantes. Creemos en la gestión, pero conocemos el valor de las palabras. Trabajamos por la victoria pero no a cualquier precio. Sabemos que la diversidad aporta mucho más que un simple ejercicio de tolerancia; apreciamos la posibilidad de enriquecernos con las miradas de otros. En este
encuentro de partidos, espacios y coaliciones estamos convencidos de que saber escuchar enseña a decidir mejor.
Autonomía por Buenos Aires no promueve candidatos vicarios, ni representantes de poderes políticos ni cenáculos económicos que ven en la ciudad una excusa, una herramienta o una conveniencia. En Autonomía por Buenos Aires nuestro objetivo inmediato y definitivo es, simplemente, Buenos Aires, sus ciudadanos y su bienestar.
Nuestros valores
Autonomía por Buenos Aires surge como fruto de una visión común acerca del destino de la ciudad:
• Nuestros valores fundamentales son los de la Constitución y de nuestra historia. Queremos la igualdad ante la ley, los principios de la República, la promoción de los derechos humanos y la justicia social, el respeto a los demás y el servicio público, la indispensable promoción desde el Estado para los que nada tienen.
• Queremos construir una ciudad segura y limpia, que se distinga por la alta calidad de su educación y su salud, que promueva un clima de convivencia y respeto por las diferencias, que cuide los espacios públicos, proteja el medio ambiente y la higiene y tenga un tránsito y un transporte ordenado y con buen servicio.
• Queremos demostrar desde Buenos Aires que es posible construir una sociedad física y socialmente integrada, donde cada uno pueda sentirse partícipe del destino común. El pueblo de Buenos Aires será una vez más ejemplo para el país, modelo de construcción de autonomía de la voluntad ciudadana, para que el hombre y la mujer puedan ejercer la soberanía popular
plena, sin abusos de poder, clientelismo ni prebendas. Mujeres y hombres libres que actúan sin otra obediencia que su conciencia individual y la ley común.
• Queremos aprovechar este contexto internacional tan propicio para consolidar la recuperación económica sentando las bases de un modelo de desarrollo sustentable y equitativo.
• Queremos recobrar para siempre la tradición y los mecanismos de movilidad social ascendente y confianza plena en las posibilidades y talentos de nuestros habitantes. Y queremos con igual firmeza establecer redes de protección pública que garanticen niveles decorosos de cobertura de necesidades básicas a quienes estén sufriendo una caída de su nivel de vida, a los injustamente castigados por las sucesivas crisis que azotaron nuestra economía, nuestra sociedad y nuestra vida cívica.
• Queremos una ciudad vital, a la vez respetuosa y trasgresora, viva para promover las artes, audaz para estimular el genio de sus creadores, sea desde las letras, el cine, el teatro y las bellas artes; sea desde sus esforzados investigadores y académicos, sus inventores y creadores de tecnología, sus emprendedores para fuentes de trabajo y mercados nuevos, sus industriales y comerciantes abiertos a lo nuevo y al futuro.
• Queremos, finalmente, conservar lo mejor de nuestras tradiciones culturales, de nuestras riquezas arquitectónicas, de esas ciudad que fue y que nos consideramos obligados a conservar con la misma firmeza con que protegemos el futuro.
Acuerdo Programático para la Ciudad de Buenos Aires

El diálogo y el consenso
Autonomía por Buenos Aires propone una nueva cultura política para fijar herramientas creativas en la relación ciudadana con su gobierno. Estamos convencidos que, en última instancia, el gobierno no es sino la expresión de la voluntad popular, la forma posible de ejercicio del poder que sólo el pueblo puede realizar. Queremos establecer un gestionar la ciudad en base a una visión estratégica y con criterios dinámicos y eficientes de administración pública.
Gobernaremos Buenos Aires en base al diálogo, la formación de consensos, la transparencia, la rendición de cuentas y la participación y el control permanente de la sociedad civil, cumpliendo el mandato constitucional de una democracia participativa y descentralizada en comunas.
Además de cumplir con las disposiciones constitucionales sobre la rendición de cuentas a la Legislatura y demás órganos de control, Autonomía por Buenos Aires informará periódica y sistemáticamente a sus organizaciones políticas sobre la gestión en marcha y estará abierta y receptiva a sus críticas y sugerencias, como así a las que surjan de la opinión pública y del conjunto de la sociedad porteña.
Llegó la hora de construir una ciudad con progreso, oportunidades y justicia para todos: Buenos Aires quiere ser abierta, democrática, segura y contribuir a la convivencia y a la paz en el país, en la región y en el mundo.
Nuestra agenda
Autonomía por Buenos Aires gobernará para lograr una ciudad integrada, moderna, dinámica y creativa. Una Buenos Aires vital, solidaria, competitiva y promotora de mecanismos de cooperación y consenso regional y global.
Esta visión se materializará con la implementación de tres agendas de gestión complementarias y que se potenciarán mutuamente:
1. La agenda local, impulsando la reconstrucción del Estado y la descentralización para brindar los bienes públicos que demandan los ciudadanos y requiere Buenos Aires para fomentar el desarrollo humano: seguridad, cultura, justicia, educación, salud, vivienda, infraestructura y medio ambiente. De este modo, potenciaremos los canales de participación para que los vecinos opinen sobre los problemas de la ciudad y controlen las decisiones de sus gobernantes. Esto facilitado por la puesta en marcha de la organización de las comunas que acercarán el Estado a los vecinos de cada una de ellas. El lazo social debe considerar las diferencias entre algunos barrios a los que les sobra mucho, y otros a los que les falta demasiado. Una integración cultural, social y física, donde la Avenida Independencia no se convierta en una frontera invisible entre un norte básicamente satisfecho y un sur muchas veces desvalido.
2. La agenda federal. No hay destino para Buenos Aires si no se respeta la autonomía que la Constitución Nacional le ha otorgado, para lo cual debe derogarse la legislación que cercena y limita arbitrariamente las competencias de la ciudad y la posibilidad de resolver los apremiantes problemas de seguridad y servicios públicos. Tampoco puede postergarse en la agenda federal
la decisión que lleve a la ciudad a un sistemático trabajo en red con otras jurisdicciones, el inevitable y urgente trato con los municipios del Gran Buenos Aires (en particular los limítrofes) así como con las provincias hermanas para resolver cuestiones comunes. Abundan problemas estructurales que sacuden las regiones menos favorecidas y que impactan en la ciudad. No hay destino para Buenos Aires si no se solucionan las injusticias sociales y los desequilibrios económicos, territoriales, institucionales, demográficos y culturales que afectan a la Nación.
3. La agenda global incluye las acciones para convertir a Buenos Aires en una de las grandes ciudades que, en este mundo hiperurbano, mueven la polea del acontecer global. Debemos contribuir a la creación de un entorno regional e internacional más estable y seguro, así como desarrollar los mecanismos de cooperación con otras grandes ciudades para aprovechar experiencias exitosas en el fomento de la competitividad. No nos resignamos a la decadencia y estamos convencidos que Buenos Aires atesora recursos humanos y culturales de excelencia capaces de convertirla, definitivamente, en lo que nunca debió dejar de ser: una ciudad a la cabeza de la construcción de un ámbito público donde sus habitantes encuentren facilitado el desarrollo de sus potencialidades de innovación, su esfuerzo y la búsqueda de la felicidad, en un marco de seguridad. Una Buenos Aires integrada a la vanguardia de las grandes urbes en la construcción del siglo XXI.

Política Social
Prioridad Niñez y Vejez
Vamos por una Ciudad de incluidos y de iguales, dónde todos podamos vivir con dignidad, porque creemos que la pobreza es violencia y genera violencia. Para bajar los índices de pobreza y terminar con la indigencia debemos estructurar una ciudad en base a criterios de igualdad y equidad. En este sentido, serán necesarias amplias redes de contención social enfocadas en el origen mismo de los problemas, y no de mera contingencia, para asegurar el ejercicio de una plena ciudadanía para todos sus habitantes.
Remarcamos la prioridad sobre los Niños y la Tercera Edad. Ellos son los sectores más desprotegidos y vulnerables de la población. Una sociedad civilizada y pacífica debe brindar protección a los más débiles. Todo el accionar del Estado y el manejo de los recursos en sus diversas áreas deberán vertebrarse alrededor de los objetivos de inclusión social y ciudadanía plena.
Para ello proponemos:
Ingreso Ciudadano para Niños y Adultos Mayores: Sin políticas de ingreso no hay solución a las cuestiones de marginalidad y exclusión social. La universalidad implica restituir derechos a los sectores más postergados.
De manera similar, el Ingreso Ciudadano para la Vejez, que para obtenerlo sólo habrá que acreditar la edad necesaria. Lo fundamental de este proyecto es la inexistencia de mediaciones políticas para acceder a los beneficios. Con esta iniciativa cortamos de raíz la llave del clientelismo político y el manejo de los pobres. Como contrapartida, existirán una serie de requisitos a los padres, como el control del embarazo, asistencia sanitaria preventiva, revisaciones médicas periódicas, planes de vacunación y asistencia escolar. El Ingreso Ciudadano es una herramienta de combate a la exclusión social e igualadora de las diferencias de origen.
Niños en situación de calle
Brindar una red de protección social integral a los niños de la ciudad de Buenos Aires que se encuentran en situación de calle.
Estar en la calle, con esto queremos decir que el agente que está en funciones dentro del programa no tiene que estar detrás de un escritorio, sino en el lugar donde está el problema.
Desarrollar un censo que incluya fichas o historias de vida. Teniendo éstas, realizar una evolución periódica de seguimiento. Temas a tener en cuenta: autoestima, planificación familiar, salud sexual y reproductiva, motivación educativa.
Educadores de calle con presencia continua en el medio para no perder el contacto con los jóvenes y para poder seguir de cerca sus comportamientos y/o cambios, planificar acciones para plantear en función de las necesidades identificadas en el joven, ayudar al joven a evaluarse, a conocerse mejor y a apoyarlo en sus trámites, respetando prioritariamente la manera como el joven siente lo que vive. Una estructura así, es para permitir desarrollar con el joven una relación, a través de la cual el joven avanza, no porque está forzado a hacerlo, sino porque cada vez más, está tomando conciencia de su condición y que por él mismo llega a buscar y encontrar medios para mejorar su situación.
Desarrollo de Políticas Sociales Locales Complementarias: Desde el Estado porteño deberán atenderse ciertas situaciones de vulnerabilidad social, como embarazo juvenil, primeros años de vida, vejez, y situaciones de riesgo o de calle.
Equipos de Calle: Partimos de la idea que entre la persona necesitada y la ayuda estatal hay un costo de acercamiento –no necesariamente monetario- que alguien debe soportar.
El Estado es quien debe hacerse cargo de garantizar ese acceso. Nuestra propuesta consiste en equipos interdisciplinarios –trabajadores sociales, docentes, médicos, psicólogos y antropólogos– que recorran las calles de la ciudad detectando aquellas situaciones que merecen presencia y contención estatal. Logrando la reinserción de las personas en sus familias y en las redes de contención institucional naturales, como escuelas y hospitales.

Políticas activas de fiscalización y control:
De los organismos nacionales y municipales que se ocupan de la atención de la tercera edad. Por ello es imprescindible que la Legislatura de la Ciudad implemente las acciones para solicitar a las máximas autoridades del PAMI informes Bimensuales del estado de las prestaciones que brinda en la Ciudad.
Implementar de inmediato un registro y posterior auditoria de todos los geriátricos de la ciudad, para lograr una mejor calidad de vida de aquellos ancianos alojados en instituciones, evitando la actual proliferación de geriátricos truchos o ilegales.
Incentivar como se hace en otras ciudades del mundo, el voluntariado de los mayores a través del sistema de abuelos solidarios.
Recuperación de los centros de jubilados como espacios de esparcimiento cultural y desarrollo social, posibilitando que utilicen su poder convocante para la promoción social de la tercera edad.

Educación
La Educación es un compromiso que la sociedad renueva con cada nueva generación. No se pide permiso para educar como no se pide permiso para vivir. Por eso, en estos tiempos en que abundan las angustias y los desencantos se vuelve imperativo restituir esperanza a las nuevas generaciones. El futuro está en juego y esto nos obliga a dejar de lado todo tratamiento simplista. La Educación no es ni debe volverse un slogan. La Educación como una responsabilidad colectiva y social poniendo como eje central el derecho del que aprende.
Cada vez que decimos sociedad decimos Educación. Es la Educación la que crea las bases de los lazos sociales, nos da los elementos para construir ciudadanía, nos enseña la importancia de la solidaridad y el sentido de la justicia.
Queremos sustraer así la educación a toda reducción economicista, ayudarla a superar todo pragmatismo cortoplacista, darle entre todos su sentido social más amplio.
Hoy es de uso común afirmar que la EDUCACIÓN debe ser una POLITICA DE ESTADO. Pero para que este discurso se concrete es necesario que la política educativa sea pluralista, recupere las “buenas viejas” prácticas de la historia de sus instituciones e incorpore novedad e innovación, imprescindibles para mantener su sentido social.
Es por ello que no se puede ser conservador en Educación. Hay que iniciar ya nuevos caminos porque Educación es condición de futuro.
Educar quiere decir ofrecer SABERES: saberes para entender, para hacer, para crear, para inventar, para trabajar, para soñar, para vivir, para vivir con todos los otros en paz.
Educación y Estado
Nuestra visión del rol y la principalidad del Estado en materia educativa, desestima las identificaciones de la educación como un bien más producido por el mercado.
En síntesis, la educación como una política pública y como una obra de acción continuada de los poderes públicos que conserve y respete la participación de los sectores privados.
Un desafío que implica que todos los miembros de la comunidad nos propongamos como elemento central de nuestro accionar el derecho de las nuevas generaciones a aprender, la decisión y obligación de los adultos a enseñar.
Una política educativa que supera -aunque incluye- el ámbito de “lo escolar”, valorando a la institución “Escuela” como la instancia igualadora, donde la promoción y la solidaridad se opongan al modelo de la competencia y el individualismo.
La política educativa no debe reducirse a una política escolar, ni a la organización del sistema educativo formal. Incluye en sus definiciones el sistema educativo formal y no formal; las formas escolarizadas y las no escolarizadas como respuesta a la demanda actual de los ciudadanos: acceder a una formación continua a lo largo de toda la vida. Lo que hace imprescindible que la Ciudad sea capaz de imaginar nuevas y diversas formas de transmitir
conocimientos y reinventar ciudadanía teniendo en cada escuela un espacio específico y propio, pero no excluyente. En síntesis una política educativa que sea parte integrante de políticas sociales integradas .
Una sociedad democrática es, por definición, una sociedad de aprendizajes compartidos, definición que se vincula con el concepto de Ciudad Educadora: una ciudad que dispone de todos sus recursos, especialmente del más rico e importante, su gente, pensando en el gobierno de la Ciudad como una red de servicios que moviliza todas las capacidades educativas, científicas, tecnológicas y culturales en pos de la mejora constante de la calidad de vida de sus ciudadanos.
Una política educativa inclusiva en la que todos los actores de la comunidad tengan igualdad de oportunidades para participar en la permanente construcción de un sistema educativo de calidad para todos.
Una acción de política educativa que impulse las necesarias transformaciones sin descuidar el trabajo cotidiano de todos los días, de la gestión cotidiana de cada uno de los servicios educativos que brinda la ciudad.
Una acción destinada a incrementar los espacios de consulta y participación de los ciudadanos en la construcción de las políticas descentralizando las cuestiones de gestión cotidiana y garantizando, al mismo tiempo, la coherencia y unidad del sistema.
En esta misma línea, acompañar y jerarquizar el trabajo docente proponiendo cambios en las condiciones laborales, en su formación y capacitación, rescatando lo más rico de la cotidianas prácticas de nuestras instituciones educativas.
Para todo ello y en el marco de lo anteriormente dicho nuestras propuestas tienen como objetivo final la construcción de un sistema educativo que enseñe a vivir bien en el mundo de hoy, posibilite el acceso a los bienes culturales, al conocimiento, a las nuevas tecnologías, que capacite para ser buenas personas que ejerzan oficios y profesiones con dignidad y al servicio del bien común. pueda saber pensar y accionar sobre si mismo y el mundo que lo rodea, a partir
de sólidos principios éticos y solidarios.
Ley de Educación de la Ciudad. La sanción de este instrumento legal pensado más a la luz de los principios y necesidades del siglo XXI, que el que se fue. La oportunidad de construir las bases normativas para un sistema educativo, a partir del reconocimiento de la historia de sus instituciones y actores y de los desafíos que nuevas necesidades y demandas sociales y ciudadanas plantean a la educación.
Una ley que:
· incorpore los conceptos propios de una sociedad democrática (igualdad, justicia, derecho a la educación, obligatoriedad, gratuidad, respeto a la libertad de enseñanza, equidad),
· garantice formas de participación como modo de ejercicio de la ciudadanía y como matriz de aprendizaje para los futuros ciudadanos,
· se apoye en la descentralización de la Ciudad como uno de los modos de construcción de lo social con la posibilidad de implementar criterios de presupuesto participativo como ejercicio de responsabilidad colectiva en el mejoramiento de la calidad de la enseñanza y de de los aprendizajes,
· garantice el financiamiento, tema clave para la concreción de aspiraciones y proyectos sociales, con la creación de fondos y otros instrumentos que permitan asegurar el servicio, sostener innovaciones en materia educativa.
En síntesis una ley que supere los “debates mínimos” que se dieron durante la década de los noventa y que redujeron la discusión a la aceptación o rechazo de estructuras organizacionales antes que a principios de acción para el normal ejercicio educativo en la Ciudad.
Educación formal, no formal e informal: En septiembre de 2002 la Ciudad promulgó la Ley de Obligatoriedad del nivel secundario. Sin embargo la obligatoriedad por sí sola no garantiza logros. Las estadísticas indican que, de cada 100 alumnos que ingresan al secundario sólo 64 llegan al último año de estudio. Dicho de otra manera 36 no egresan nunca, no terminan ni van a terminar la escuela media. Proseguir con la política de reinserción en la escuela formal no invalida la necesidad de buscar otras respuestas al problema de la formación de nuestros jóvenes explorando el campo de la educación no formal e informal, la capacitación laboral, la formación profesional, la acreditación y cualificación de saberes no escolarizados.
En una sociedad que se perdieron los oficios, donde no se enseña a trabajar, hay que capacitar.
Desde el mozo que sirve el café hasta las profesiones más cotizadas requieren capacitación, actualización y transmisión de los saberes acumulados. Esta cadena se rompió en Argentina, durante los noventa perdiéndose buena parte del aporte de nuestros abuelos inmigrantes. Por lo tanto hay que hacer un esfuerzo por recuperarlos creando de una red de centros de Formación Profesional y Educación No Formal que den respuesta a desafíos del trabajo siglo XXI, acceso al primer empleo o generación de microempleo.
En este sentido la Educación puede ser parte de una política de combate contra la pobreza. Así la creación de un servicio de capacitación, calificación, certificación y acreditación de saberes, con tres pilares fundamentales: la capacitación acelerada, no escolarizada; el desarrollo de capacidades organizativas; y el acceso a microcréditos para emprendimientos laborales avanzaría sobre la problemática actual del menor desempleo pero con trabajadores con ingresos por debajo de la línea de pobreza y/o precarizados y ayudaría a la concreción de empleos con mayor densidad de conocimientos y mejores salarios.
Transformación progresiva del Plan de Becas de nivel Medio: ¿Cuál es la diferencia conceptual entre nuestra propuesta y el tipo de políticas aplicadas hasta aquí? Proponemos en lugar de continuar profundizando programas discrecionales que buscan focalizar la asistencia en aquellas personas y/o grupos familiares con determinadas privaciones (y que por otra parte no cubren la demanda real de estos grupos), deberíamos tender a desarrollar intervenciones de carácter más universal y preventivo. Por ello proyectamos la creación de un fondo especial con la expresa determinación de reservar una masa de recursos con el objetivo primordial y único de destinarlo a financiar un cierto ingreso monetario a todos los niños y niñas entre los 12 y 18 años de edad que vivan en la Ciudad de Buenos Aires y se formen efectivamente en instituciones educativas que dependan del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.
Institucionalización de la Evaluación de la Calidad Educativa: la evaluación no es exclusivamente medición de logros de los alumnos. Supone no sólo definir problemas y describirlos, sino descubrir los factores que permiten explicarlos, de modo de diseñar estrategias de intervención específicas que permitan superar los problemas identificados. Por ello proponemos la creación de una Comisión Evaluadora de la Calidad Educativa en la Ciudad de Buenos Aires que con la participación conjunta del Poder Ejecutivo, el Legislativo y la comunidad, tenga a su cargo el seguimiento de los equipos técnicos encargados de dar sentido pleno a la evaluación. En suma, poner la evaluación al servicio del mejoramiento de la calidad de la formación que se brinda en el conjunto del sistema educativo. Calidad entendida aquí como un derecho de todos y al alcance de todos.
Más y mejor inversión en Infraestructura: base material indispensable para educar más y mejor. La calidad educativa requiere también que la infraestructura ofrezca el mejor ambiente para aprender y enseñar. Por ello debemos invertir más y mejor en edificios escolares, equipamiento educativo y acceso a redes para todos los alumnos del sistema educativo con el fin de compensar los últimos años de desinversión y revertir el abandono con mecanismos más claros y precisos de distribución presupuestaria y ordenamiento administrativo que elevan los niveles de eficiencia en la ejecución presupuestaria. Incorporar nuevos mecanismos de evaluación de políticas públicas en el sector específico para garantizar mejor planificación a mediano y largo plazo. Terminar con el alquiler de escuelas explorando alternativas como el rápido estudio y ejecución de las expropiaciones dispuestas por Ley, la implementación de sistemas de leasing, o la constitución de fideicomisos administrados por el Banco de la Ciudad de Buenos Aires destinados a la compra de los inmuebles, constituyen variantes que merecerían la pena ser analizadas con detenimiento, a efectos de no seguir dilapidando recursos, y acrecentar el patrimonio de la ciudad.
Política docente. Recomposición salarial, inversión sostenida del Estado en capacitación y actualización permanente; promoción de incentivos vinculados a esa capacitación, investigación para saber qué y cómo mejorar; nuevos enfoques para la formación profesional; reformulación de la carrera docente, deben ser algunas de las líneas de acción que deberán incorporarse como elementos centrales de una política destinada al mejoramiento de la calidad de los recursos humanos en educación de la Ciudad.
Cobertura total de la escolaridad básica obligatoria. La universalización de la cobertura del último año del nivel inicial constituye uno de los objetivos prioritarios de nuestra política educativa. Varias son las razones que apuntan a fundamentar esta medida. En primer lugar, se ha comprobado el efecto positivo que tiene el haber asistido al nivel inicial en la adaptación y el rendimiento escolar futuro en el nivel primario. Además, en términos de equidad, la incorporación al nivel inicial en forma obligatoria termina beneficiando especialmente a la población de menores recursos, donde el contexto socio-familiar representa una desventaja en comparación con el ambiente escolar. Del análisis de la cobertura actual de la población de 5 años de edad en la Ciudad de Buenos Aires resulta esta necesidad, en tanto una proporción de los niños de esa edad se encuentra aún fuera del sistema educativo. Asimismo, en el mismo
objetivo prioritario y las mismas fundamentaciones se encuentra la ampliación progresiva y sostenida de la oferta pública para niños de 45 días a 4 años.
En síntesis, entendemos que debemos sostener, apoyar y fortalecer la escuela pública, pero también y con el mismo énfasis respetar y articular esfuerzos, integrar y asociar las iniciativas, entusiasmos y emprendimientos de todos los sectores sociales que compartan la preocupación por la construcción de una república, una democracia pluralista y una sociedad igualitaria. Entre todos y con todos. Sustituyendo competitividad darwinista por cooperación solidaria, tecnocracia por participación, protagonismos individuales por construcción colectiva, exclusión por equidad.

Salud
Salud de calidad y accesible para todos
La atención a la salud en Buenos Aires se encuentra fragmentada y desarticulada, carece de un plan de manejo general y se organiza en torno a grandes hospitales que están desbordados.
Bajo la estrategia de la Atención Primaria de la Salud proponemos Hospitales Generales que concentren la alta complejidad dotados con tecnología de última generación, y una vasta Red de Baja Complejidad desconcentrada, todo cruzado por el principio de la atención gratuita y de calidad sin distinciones.
Atención Primaria: Creación de centros de Salud Barriales que posean la infraestructura y la dotación de profesionales y auxiliares necesarios para atender problemáticas sencillas o que no requieran internación o instrumental muy específico o avanzado. En estos centros se pueden resolver la mayoría de los problemas de salud de la población. La Ciudad debería contar con uno
de ellos cada 20 manzanas. Ambos niveles deben articularse en el territorio de la Ciudad en función a características demográficas, socioeconómicas y de riesgo sanitario de los diversos
Barrios de Buenos Aires.
Accionar Activo de Sector Público: Hablamos de grupos interdisciplinarios que salgan a recorrer las calles en busca de situaciones de riesgo social y sanitario, para brindar ayuda en la emergencia, la atención adecuada y su posterior seguimiento.

Recursos Humanos: Sistema de mérito y concursos. Se capacitará continuamente en servicio, a través de cursos, congresos y pasantías con reevaluaciones constantes.
Producción estatal de medicamentos: Utilizar la capacidad instalada y la concurrencia de desarrollo e investigación de las universidades nacionales para que el Gobierno Porteño se haga cargo de la producción estatal de medicamentos esenciales, en conjunto con el Polo de Investigación y Desarrollo.
Programas de Prevención: Impulsaremos el fortalecimiento de los programas existentes y desarrollaremos nuevas campañas de acuerdo a la enfermedades más frecuentes, acercando la atención donde vive y trabaja la gente. Poniéndolos al alcance de la comunidad, y llevándolos a los barrios, escuelas y puntos críticos. Ej: Plan Materno-Infantil, Inmunizaciones, Plan nutricional, Adicciones, Tercera Edad, Enfermedades cardiovasculares, Diabetes, Accidentes, prevención del cáncer, Salud Mental, Salud Bucal, Salud Laboral, etc.

Ampliación del acceso y disponibilidad de los Programas de Salud Reproductiva:
En lo referente a este tema la prevención es clave. Apoyamos programas existentes de Salud Reproductiva, pero los mismos tiene un defecto: están lejos de la gente a la cual pueden ayudar. Garantizaremos el acceso cotidiano de los jóvenes y la población que se busca proteger.
Juventud
Legislaremos para cumplir el mandato constitucional de conformar el Consejo de Juventud en dónde se garantice la verdadera participación de los jóvenes de la Ciudad y sus organizaciones.
También proponemos sancionar las leyes para la creación de una Unidad Coordinadora de Políticas Públicas de Juventud en la cual confluyan todas las dependencias del Gobierno relacionadas a la temática juvenil. Ambos organismos interactuarán para tomar decisiones y definición de políticas. Deberá garantizarse una verdadera y plena participación de los jóvenes
que viven y transitan por la ciudad de Buenos Aires.
Empleo Joven: Para que los jóvenes tengan futuro y puedan convertirse en adultos necesitamos convertir en un hecho el Derecho al Trabajo, ya que este es uno de los canales que asegura y potencia nuestra integración política, económica y social. Una política de juventud debe atender la problemática del Empleo para que esta sea concebida como parte de una estrategia de desarrollo y no como simple componente de políticas sociales. Para la garantía y promoción del trabajo en relación de dependencia proponemos la creación de una unidad destinada al control, promoción e identificación del empleo joven.
Creación del Programa de Pasantías y de Jóvenes Profesionales transparente, con la participación de las Universidades Públicas e Institutos Terciarios Públicos. Dicho programa apuntará a reconstruir incentivos y oportunidades laborales para este sector etareo. Los listados de postulantes serán publicados en Internet para facilitar el control ciudadano del acceso a los puestos
Jóvenes Emprendedores: es imperioso generar y alentar en los jóvenes sus competencias profesionales para su empleabilidad, a partir de la potenciación de sus capacidades emprendedora para desarrollar alternativas de autoempleo y la realización de proyectos propios de gestión empresaria. Se deberá garantizar la capacitación, información y continuo asesoramiento.

Políticas sobre drogas y adicciones en general: El tema es profundo, y cruza las relaciones del poder político, la policía y el mundo criminal, pero en el otro la dimensión del sujeto, en un marco de degradación social, desencanto, falta de perspectiva, de sentido y de frustración. Por ello esta temática deberá estar presente en la definición y acciones de la política social estatal con un claro abordaje jurídico político y un abordaje comunitario.
Rockódromo y espacio seguro para el ocio juvenil y la realización de pequeños y mega eventos:
Proponemos la apertura de espacios públicos, con instalaciones y equipamiento adecuados –escenarios, sonido, etc– para albergar grandes y pequeños eventos artísticos, musicales y de entretenimientos y un circuito de bares y locales bailables con garantía de seguridad y servicios públicos estables
La ubicación de los locales de bailes debe planificarse separándolos de zonas residenciales y armando circuitos que potencien a los mismos como atractivos turísticos. La Ciudad garantizará la seguridad, contención y mantenimiento.
Los problemas de vivienda afectan a toda la población, y en particular a los jóvenes. La dificultad para acceder a un alquiler, financiación o compra del primer hogar para jóvenes representa un escollo en las perspectivas de futuro y el desarrollo de un plan de vida personal.
Planteamos Líneas de Crédito Joven del Banco Ciudad para compra de viviendas y fundamentalmente para alquileres. Para ello una de las vías puede ser una línea de créditos que tengan en cuenta otras cuestiones del beneficiario, más allá de su situación financiera.
Ciberculturas de Bs. As. (Proyecto Cultural para menores de 19 años inclusive): Sus objetivos principales son brindar espacios de participación a los jóvenes y generar alternativas de capacitación y formación laboral mediante la implementación de estos programas:
1. Programa de jóvenes autores: Concurso de poesía y cuento (incentivo a la lectura y escritura).
2. Programa de jóvenes sobresalientes: Destinado a reconocer jóvenes que desde el anonimato realizan trabajos de tenor social para la comunidad (scouting social).
3. Programa de imágenes juveniles: Concurso de fotografía, proyectos digitales y video.
4. Programa de técnicas corporales que apunten a un desarrollo físico y espiritual.
5. Jornadas de Deportes: aspiran al apuntalamiento del deporte como generador de buenas conductas y como espacio de desarrollo de la juventud. Interrelación del aprendizaje deportivo con el del alcance social de la propia práctica sana como formador de personas íntegras.

Tercera Edad
Promover la salud de la población de 60 y más años de la Ciudad de Buenos Aires elevando su promedio y calidad de vida.
Articular programas y actividades tratando de utilizar los recursos disponibles para aquellos que no tengan cobertura médico-social, garantizando la equidad, universalidad, eficacia y eficiencia de los servicios de salud administrados.
Promover alternativas de apoyo comunitario de asistencia social para que se conviertan en una opción eficaz a la institucionalización del anciano y promover el mantenimiento del mismo en el seno de la familia y la comunidad.
Proporcionar apoyo y recursos a la familia, cuando sea necesario, como incentivo para que continúe siendo el elemento clave en una adecuada atención a largo plazo de los ancianos.
Enfatizar la promoción de salud y prevención y fomentar estilos de vida satisfactorios desde edades tempranas que contribuyan a disminuir los factores de riesgo de la ancianidad, detectando tempranamente aquellos de mayor riesgo de discapacidad.
Fomentar el concepto programático de cuidados progresivos, en sus modalidades comunitarias o institucionales, que contemplen las demandas y necesidades del anciano, cada vez que ellas ocurran, con el fin de satisfacerlas.
Asimismo, que tanto los ancianos como sus familiares, puedan participar en la identificación de necesidades y en la formulación de soluciones.
Promover que la educación para la vejez comience desde edades tempranas, de manera gradual y sistemática, tanto en educación formal (escuelas) como educación no formal (familia, medios de comunicación, instituciones, grupos sociales, etc.) y que incluya el autocuidado y la preparación para el retiro como parte de la misma.
Promover estudios de costo-beneficio y costo-eficacia para definir las alternativas más adecuadas de atención desde el punto de vista científico y humano.
Construcción de una red de protección social que atienda las necesidades específicas de la tercera edad en la ciudad.
Continuaremos con el apoyo a centros de jubilados: mediante la entrega de muebles y materiales, así como la realización de actividades culturales y recreativas en ellos.
Fortaleceremos el Plan de Cuidadores de Ancianos, mediante el financiamiento del servicio de cuidadores que visitarán regularmente los domicilios de los adultos mayores que se encuentren solos o con necesidad de asistencia, a fin de evitar la institucionalización. De esta manera tendremos un doble beneficio: generaremos una fuente de trabajo a beneficiarios de planes sociales, que cumplirán con su contraprestación cuidando adultos mayores a domicilio y
tendremos asistidos a cerca de 60.000 adultos mayores que necesitan cuidados domiciliarios a un costo más bajo que la institucionalización en residencias para adultos mayores.
Reorganizaremos el uso de los hogares de ancianos del GCBA, convirtiéndolos en Residencias permanentes de puertas abiertas destinados a la atención las 24 hs para personas con escasos recursos estrictamente destinados a aquellos que no pueden valerse por si mismos y que no tienen familiares, ofreciendo comedor, atención médica y psicológica, actividades recreativas, talleres de lectura y escritura.
Se desalentará la institucionalización de adultos mayores, dirigiéndose las acciones a la permanencia de ellos en sus hogares, con ayuda del GCBA capacitando y financiando cuidadores domiciliarios.
La industria cultural funcionará a contraturno (espectáculos en horarios de la tarde) destinados a este sector, con precios rebajados.
Se fortalecerá la unidad de contralor de geriátricos privados. Las instituciones del GCBA deberán ser controladas también por esta Unidad. Conformación de una base de datos sobre la situación de la tercera edad y sus organizaciones.

Cultura e Industrias Culturales
Creatividad, innovación, trabajo y desarrollo
La cultura es un elemento imprescindible en el desarrollo humano y en la construcción de ciudadanía, por tal motivo debe estar presente en toda acción de gobierno que tenga como objetivo la erradicación de la pobreza y la inclusión social. Las industrias culturales no sólo son portadoras de identidad y generadores de bienes simbólicos indispensables para el desarrollo de la sociedad y de sus ciudadanos, sino que también son emprendimientos de negocios basados en la creatividad y la innovación, considerándolos una herramienta clave para el desarrollo de una economía urbana.
Conforman un sector dinámico, destacándose su carácter mayoritariamente PyME y la cantidad y calidad de los puestos de trabajo y del valor agregado que generan. Hoy más que nunca estamos en condiciones de lograr una diferencia exportable y el consecuente ingreso de divisas, mediante la comercialización externa de bienes y servicios portadores de alto valor agregado, diferenciados y renovables.
Estas potencialidades de expansión y crecimiento confirman la conveniencia estratégica de generar acciones y establecer políticas de Estado tendientes a fomentarlas, canalizarlas, apoyarlas y posicionarlas en el mercado interno y de exportación. En este sentido nuestras propuestas son:
Política de Promoción de las Industrias Culturales coherente y unificada: Debemos dar una estrategia de apoyo y promoción a las industrias general y de largo plazo, centralizada en la Secretaría de Cultura de la Ciudad.
Apoyo a las Industrias Culturales: La promoción debe ser general y de libre acceso a todos aquellos que deseen invertir o producir en el sector, basándose en el criterio de igualdad. Se garantizará la transparencia mediante convocatorias públicas, con requisitos y criterios de selección claros y objetivos, y mediante una instancia independiente conformada por reconocidas personalidades de cada sector que defina la entrega de apoyo en virtud de criterios de calidad y mérito.
Agencia de Promoción para Industrias Culturales: Crear una Agencia que tendrá como misión desarrollar una política coherente, unificada y de largo plazo en la promoción del sector, mediante la implementación de programas que permitan reunir información sobre la producción, consumo y exportación de bienes y servicios de las industrias culturales en la Ciudad, realizando
perfiles y estudios de mercado y obteniendo información acerca de ofertas comerciales del exterior, así como capacitando a los emprendedores culturales en temas vinculados a la roducción, comercialización y exportación.
Motivar la Innovación y la Diversidad Cultural: El primer paso para apoyar las industrias culturales es fomentar la aparición de nuevas tendencias, pensamientos e ideas. Garantizaremos desde el Estado el efectivo ejercicio del derecho a la libertad de expresión, a la creación y al acceso a los bienes y servicios culturales. Proteger la diversidad cultural, la misma debe ampliarse y multiplicarse, para así generar incentivos e inquietudes que luego podrán evolucionar hacia emprendimientos productivos.

Escuela de Artes y Oficios: La formación de nuevos escenográfos, maquilladores, foquistas, iluminadores, carpinteros y herreros especializados, entre otros, pueden representar hoy una oportunidad de trabajo para cientos de personas, en especial jóvenes. La creación de una Escuela de Artes y Oficios para las Industrias Culturales es una necesidad imperiosa en una ciudad que anualmente genera nuevos directores de cine, actores, músicos, cantantes, coreógrafos y artistas plásticos, que requieren de estos trabajadores de la cultura como complemento indispensable de sus creaciones.

Fábricas Culturales – Lugares “para hacer”: Proponemos el impulso y la creación de
Fábricas Culturales en edificios que hoy se encuentran en desuso, recuperando para el espacio público ámbitos marginados, en los cuales los vecinos de cada barrio, en especial los jóvenes, tengan un ámbito para la creación y la generación de emprendimientos artísticos, que puedan ser el germen de vocaciones profesionales o del surgimiento de empresas culturales, ofreciendo así un instrumento más de democratización y accesibilidad a la cultura.

Ciudad Destino y Eje Cultural: El Turismo es una forma de exportar cultura y puede ser una de las principales industrias de la Ciudad. La actividad cultural de Buenos Aires representa un polo de atracción para el turismo, en base a su variedad y cantidad en la oferta que presenta en forma permanente. Debemos posicionar a Buenos Aires en un lugar de liderazgo y eje cultural de América, tanto en cuanto a la calidad de su producción como a la visibilidad de la misma.

Patrimonio Cultural: El patrimonio cultural de la Ciudad de Buenos Aires -tangible, intangible y viviente-, constituye uno de los recursos más importantes y vigorosos que poseemos y una fuente de creación de empleo e ingreso de divisas por ser el principal atractivo del sector turístico. La preservación –en primer lugar- y su aprovechamiento racional y sustentable –en segunda instancia- son imprescindibles, y para ello exigiremos la reglamentación de la Ley de Patrimonio Cultural de la Ciudad. Debemos garantizar el efectivo cumplimiento de las normas de
protección, aplicando sanciones para el incumplimiento y brindando beneficios a quienes contribuyen a su protección. Se debe restaurar lo que se encuentra deteriorado en el centro de la Ciudad y en los barrios.
Espacio Público para la Cultura: Pondremos las plazas y parques a disposición de las pequeñas bandas de barrio y otras expresiones artísticas durante los fines de semana, como forma de integrar y dar un espacio a los jóvenes que hoy están excluidos del circuito comercial.
También proponemos el llamado a la revalorización de murales y paredones, a través del trabajo de artistas y de la comunidad en general; y la instalación de esculturas y obras en todo el entramado urbano de la ciudad, respetando el estilo de cada zona.
Multimedio de la Ciudad: Hay que potenciar los canales de comunicación y producción cultural que la Ciudad ya tiene, utilizándolas como medios de multiplicación y difusión. Este multimedio abarcará a las radios y el canal de TV –que deberá replantearse sus contenidos y encaminarse hacia la televisión por aire- así como la creación de una Editorial de la Ciudad.
Edificios Emblemáticos de los Barrios: Proponemos la restauración de los edificios emblemáticos de cada zona, con la participación de los albañiles, herreros, carpinteros, entre otros oficios, del barrio -especialmente jóvenes- a quienes se los capacitará en las tareas específicas de restauración arquitectónica, logrando no solamente su participación en la recuperación del espacio, sino también brindándoles una mayor especialización en su oficio. Esta tarea se llevará a cabo mediante la creación en cada barrio de Escuelas- Taller de Restauración.
Cultura y Desarrollo Social: Proponemos redefinir el rol de los centros culturales barriales, fortalecerlos, y transformarlos en espacios de creación y acceso a la cultura, especialmente para
los sectores más vulnerables y desprotegidos, como el caso de la niñez en situación de calle, los jóvenes y los adultos mayores.
Desarrollo Económico y Empleo
Nuestra Ciudad posee mejores niveles de ingreso, actividad económica, formación educativa y acceso a la cultura del país, pero arrastra graves problemas sociales, ambientales, de distribución del ingreso, de servicios, de desempleo y de marginalidad.
Por ello es también la Ciudad de las Villas, de los chicos de la calle, de los barrios postergados, de los más brutales e inmorales contrastes. Ante esta contradicción nosotros trabajaremos por una Ciudad que pueda sostener altos niveles de producción y el pleno empleo en el tiempo, y que logre patrones de estabilidad que le permitan atender sus programas sociales y mantener a su vez el dinamismo económico.

Líneas de Crédito Especiales para personas carenciadas: Deben darse los mecanismos financieros para que desde el Estado y el Banco Ciudad se acerquen créditos y “microcréditos” a
sectores sin acceso al sistema financiero, lo cual brinda ayuda a situaciones de riesgo social temporario y da posibilidades de proyección a pequeños proyectos personales y familiares.

Política activa de creación de empleo: Proponemos la creación de nuevas fuentes de trabajo, como objetivo prioritario, dirigidos especialmente a los jóvenes que se incorporan a la actividad laboral, a los desocupados y a los discapacitados promoviendo programas de capacitación y reconversión, coordinados con las áreas de educación y cultura, y mediante la creación de Oficinas de Capacitación y Empleo en las Comunas, adecuándolos a las necesidades y características de los vecinos de cada una de ellas. Legislaremos para dar lugar al Consejo Económico y Social, tal como lo manda la constitución, para articular estas dinámicas.

Apoyo a Industrias y Comercio: La innovación debe ser una dimensión esencial de la economía de Buenos Aires, y en tal sentido debe darse apoyos diversos a las industrias que promuevan y que generen nuevos emprendimientos privados en un marco ordenado.

Reforma Tributaria: Los impuestos deberán ser una herramienta clave para mejorar la distribución del ingreso: Vamos por tributos igualitarios y progresivos, que contribuyan al logro de la igualdad y den autonomía financiera a la Ciudad. Debe ir desatándose paulatinamente la recaudación local del regresivo y procíclico Impuesto Sobre los Ingresos Brutos. También deben fijarse pautas que mejoren la equidad de los impuestos a la propiedad, así como adecuar las tasas por uso y ocupación del espacio público. Para ello es indispensable un nuevo sistema de información y administración tributaria de la ciudad.

Empleo
Proponemos implementar acciones concretas para la creación de nuevas fuentes de trabajo, como objetivo prioritario, dirigidos especialmente a los jóvenes que se incorporan a la actividad laboral, a los desocupados y a los discapacitados promoviendo programas de capacitación y reconversión, coordinados con las áreas de educación y cultura, y mediante la creación de Oficinas de Capacitación y Empleo en las Comunas, adecuándolos a las necesidades y características de los vecinos de cada una de ellas.
En tal sentido el Estado debe tener un accionar activo, brindando oportunidades de capacitación según las necesidades del mercado laboral. Se debe también legislar para dar lugar al Consejo Económico y Social, tal como lo manda la constitución, para que juegue un rol de articular de estas dinámicas.
Fomentos impositivos nominales con topes reducidos, dentro de un marco de Equidad Tributaria
e Igualdad de Oportunidades.
Creación de oficinas de empleo y formación que sirvan para conectar la oferta y la demanda de trabajo, a través de programas activos y flexibles de formación y reconversión laboral. Que sean preactivas y generadoras de innovaciones laborales en una ciudad inserta en el mundo.
Emprenderán un monitoreo permanente de nuevas asignaturas, con capacitación constante y actualización de conocimiento en el área laboral. Promoverán vínculos con el área de comercio exterior y financiamiento, buscando siempre la generación de valor.
Infraestructura, Medio Ambiente y Calidad de Vida
Resulta fundamental la integración con el área metropolitana, para dar solución al manejo de los problemas de las cuencas hídricas, de transporte, de residuos, de jurisdicción y de obras y servicios.
Los problemas estructurales del sistema necesitan de soluciones de largo plazo que trascienden las administraciones de turno. Buenos Aires debe ser una ciudad con un desarrollo urbano equilibrado, con obras y servicios que mejoren la calidad de vida, atractiva y amigable, que invite a ser vivida y disfrutada.
Nuestra propuesta de desarrollo urbano se resume en los siguientes ejes: integración territorial;
hogar digno para todos como parte del entramado urbano; transporte seguro, ordenado y limpio
y descongestión del área central y ampliación, mantenimiento y manejo de los espacios verdes.
Todo esto se hará pensando en la escala metropolitana de la Ciudad y la relación de cooperación y liderazgo que debe entablarse con el conurbano.

Desarrollo del Plan Urbano Ambiental y reformulación del Código de Planeamiento Urbano: Proponemos abordar integral y coherentemente los usos y límites que tendrá el espacio público. El mismo incluirá las directrices sobre la calidad de medio ambiente que deberá respetar el desarrollo urbano de la Ciudad en su dimensión Metropolitana con los problemas –y soluciones- comunes que tenemos con el conurbano. Para pensar el Espacio Público y las Obras de la Ciudad debe recuperarse la capacidad estatal para diseñar políticas que vayan más allá de los intereses y negocios inmobiliarios.

Vivienda y Hogar: En la ciudad hay precariedad y déficit habitacional, y esto cruza todas las clases sociales, por asentamientos en malas condiciones, sin techo, precio de alquileres o la inaccesibilidad de la clase media a un crédito hipotecario. En la Ciudad hay centenares de miles de personas en riesgo habitacional. Debemos solucionar para todos la cuestión de la vivienda y el hogar. La falta de vivienda o sus malas condiciones deben ser resueltas buscando una política habitacional y una legislación acorde integrada al Plan Urbano del que hablamos. La vivienda debe tener las condiciones necesarias para que cada familia encuentre en ella un hogar. Hablamos de una Ciudad sin barrios marginales eliminando las propias causas que dan origen a esos asentamientos. Planteamos la urbanización de las Villas con viviendas que deben ser realizadas con criterios arquitectónicos de calidad y de diseño, integrándose al paisaje urbano de su barrio armónicamente y no creando “ghetos” de exclusión.

Transporte de calidad en todos los Barrios: En cuanto al transporte, la distribución de los ingresos públicos aquí se da al revés: se subsidia implícitamente al automovilista individual en detrimento del transporte público masivo. Debemos desalentar el empleo del auto particular para traslado al área central, y lograr que cada barrio tenga un medio de transporte rápido, seguro y digno. La educación vial y el ordenamiento del tránsito son también parte del nuevo contrato moral y del orden para la convivencia y el respeto.
Continuaremos y completaremos las obras en curso de ampliación de la Red de Subterráneos y proyectaremos nuevas líneas transversales dándole acceso al Subte a barrios en dónde hoy no existe, superando así las propuestas actuales. La ciudad debe exigir a la Nación que se le entregue la competencia y las potestades de control sobre la red de subterráneos, para regular sus precios y la calidad del servicio. Además impulsaremos la modernización del Sistema Ferroviario que atraviesa la ciudad posibilitándole a los vecinos un transporte rápido y confortable de acceso al área central.
También completaremos el Sistema Metropolitano de Transporte Guiado con la construcción de
nuevas líneas de Premetro. De esta manera buscamos asegurar que cada uno de los barrios de la Ciudad tenga un medio de transporte rápido para trasladarse. Asimismo deben controlarse y ampliarse las opciones de medios de transporte público de calidad de superficie.
Inundaciones y Plan Hidráulico: Para evitar las consecuencias de estos fenómenos naturales se debe adaptar la infraestructura de la ciudad realizando las obras necesarias en las siete cuencas más críticas, abordándolas de manera integral.
Igualdad dentro del territorio: Promover la equidad en la distribución, desde el Gobierno de la Ciudad, de oportunidades vitales, condiciones económicas, espacios de desarrollo material, cultural y simbólico. En este sentido se entroncan las políticas específicas para diversas áreas (Sur y Oeste, por ejemplo).

Ciudad Parque: Intensiva campaña de forestación en toda la Ciudad. Emplazamiento de pequeños espacios verdes en zonas de alta concentración urbana y construcción de bulevares arbolados sobre las avenidas de doble mano cuyo ancho de calzada supere los 30 mts. (similar al de Av. de los Incas).

Política de Residuos: La ciudad produce 5000 toneladas diarias de basura. Debe trabajarse en una política de gestión y control de los residuos, del sistema de tratamiento y disposición final a cargo del CEAMSE, y de programas de reciclado y recuperación de residuos sólidos. Tal política se basará en los ejes de Basura Cero y Reciclaje. El reciclaje no sólo propicia el equilibrio ambiental y la sustentabilidad económica, sino que implica la posibilidad de exportar materiales (que hoy se desperdician) y la creación de nuevos puestos de trabajo.

Políticas Ambientales y de Control Ambiental: Deben aplicarse la Ley de Aire y de Ruido para controlar estos contaminantes, Creación de Tribunales Ambientales, Programas de Educación Ambiental –más allá de los existentes en las escuelas-, Ley de Residuos Peligrosos creando el Registro y sancionando con fuerza los incumplimientos y ejercicio del liderazgo de la ciudad en el área metropolitana para articular la política ambiental con el Gran Buenos Aires. Mantenimiento, Limpieza y Pequeñas Obras: Cuestiones cotidianas como iluminación, mejora de aceras y pavimento, limpieza de calles y barrido y mantenimiento de sumideros y la poda de árboles, entre otras, son acciones que resultan indispensables, y que deben hacerse, no sólo para mantener en pie las obras ya realizadas, sino para que las calles de la ciudad sean espacios más seguros y confortables.
Puerto: La ciudad debe recuperar sus potestades sobre el puerto, para ejercer su autonomía económica y política plenamente. La presencia del Gobierno de la Nación en el puerto, tal como funciona actualmente, no persigue un fin nacional, ni aporta al funcionamiento como complejo logístico en la cadena de transporte. El Puerto tiene un valor económico y de generación de empleo indiscutible. Tiene un valor de infraestructura a nivel nacional, al que la actual administración aporta poco. Desde la Ciudad hay que considerar tanto la necesidad de la articulación logística como el impacto urbano. Ambos pueden mejorar enormemente con el acceso ferroviario y la gestión de centros de transferencia de transporte.
Espacio Público y Patrimonio Urbano
Garantizar la accesibilidad, transitabilidad, conectividad, uso y goce de los espacios públicos, a todos los habitantes de la ciudad. El espacio público debe ser valorizado haciendo cumplir estrictamente la normativa, impidiendo su enajenación contraria al bien común y a los intereses de la Ciudad y el avance excesivo sobre el mismo mediante actividades comerciales y la polución visual y auditiva.
Recuperar para el ciudadano todos los espacios públicos posibles, que deben formar parte de una concepción única y orgánica en la que se destaque su carácter de patrimonio urbano, y que sea presentado a los habitantes como bien social, y a la vez como bien propio.
Ordenar visualmente la ciudad a través de una política estricta a largo plazo en materia de publicidad exterior, que tienda a la conformación de zonas de restricción absoluta y zonas de transición (en las cuales la publicidad exterior será severamente limitada en sus usos). Remover en el corto plazo la publicidad en los márgenes de las autopistas y las vías rápidas de circulación vehicular. Cesar la explotación irregular de la publicidad en el mobiliario urbano. Implementar un estricto control de la explotación publicitaria del nuevo mobiliario urbano. Reconvertir el cableado aéreo en tendido subterráneo en un plazo prudencial de cinco años en toda la ciudad. Inmediata reconversión en el área en que la Ciudad ha decidido promover ante el Comité del Patrimonio Mundial de la UNESCO para que sea declarada “Paisaje Cultural de la Humanidad” Políticas activas para la protección, valoración, preservación y difusión del patrimonio cultural, arquitectónico, histórico, urbano y natural. Transformar al patrimonio en un recurso no solo histórico y cultural, sino también económico, que pueda ser gozado por todos sus habitantes y sus ocasionales visitantes Difusión y promoción “Ley de protección del patrimonio”.
Revalorización y puesta en valor de edificios y lugares significativos de la ciudad.
Reconvertir la relación entre la ciudad y la franja costera, reafirmando la vinculación de la ciudad con el río, preservando los recursos hídricos y privilegiando su uso recreativo y gratuito.
Recuperar la costa y maximizar la accesibilidad (infraestructura y transporte). Recuperar el corredor verde de las costaneras Norte y Sur, determinando definitivamente la conformación de la costa con perfil de uso público irrestricto, sobre el Río de la Plata.
Reorganizar la oferta comercial en la vía pública, creando un sistema sustentable de ferias que tienda a revitalizar zonas subutilizadas, subsanando las serias falencias normativas en materia de elaboración y expendio de alimentos en el espacio público y combatiendo a quienes ejerzan actividades comerciales de manera ilegal.
Para vendedores ambulantes, promover el emprendimiento comercial propio mediante incentivos, asesoramiento y un marco jurídico con garantías y créditos de retorno solidario (blandos) para la instalación básica de la actividad desalentando la ocupación y el comercio ilegal en la vía pública.
Restablecer la figura del “Cuidador de Plaza”. Recuperación, ampliación y mejoramiento de los espacios verdes y las vías públicas así como de las áreas de calidad ambiental patrimonial. Liberar de toda intrusión las áreas verdes públicas trabajando con áreas de desarrollo social (para facilitar relocaciones) y legal (para iniciar acciones de desalojo).
Participación ciudadana con de planes de manejo mediante la gestión asociada donde estado y sociedad cogestionan la gestión, el uso, el mantenimiento y el control de los espacios públicos y los espacios verdes.
Generación de áreas verdes en zonas con carencia de ellas, mediante el mecanismo de permitir la transferencia de C.C.T. (capacidad construible transferible) a otras áreas con la condición que el propietario de la parcela transforme la misma en una plaza pública y la misma sea donada a la ciudad. Emplazamiento de pequeños espacios verdes en zonas de alta concentración urbana y construcción de boulevares arbolados sobre las avenidas de doble mano. Conformar sistemas de corredores verdes que atraviesan la ciudad y crear nuevas áreas a través de la refuncionalización de las playas ferroviarias y/o equipamientos obsoletos.
Ampliar la oferta de áreas peatonales. Favorecer la accesibilidad y procurar un espacio urbano inclusivo a través de la supresión de las barreras urbanas en todos los espacios de dominio público.
Procurar un centro urbano que tienda a “amigarse” con el peatón, estableciendo restricciones al
tránsito vehicular particular y favoreciendo el transporte público de pasajeros.
Consolidar y ampliar las áreas de protección histórica existentes para poner en valor sectores urbanos de rápida recuperación y potencial calidad, reforzando el carácter y los rasgos de identidad.
Rediseñar y reemplazar progresivamente el sistema de alumbrado público, favoreciendo la utilización racional de los recursos energéticos.
Ordenamiento de la tenencia de animales domésticos. Implementar un estricto control de animales en el espacio público con sanciones efectivas (paseadores de perros).
Censo y licencia de los animales domésticos. Registros de profesionales veterinarios, de paseadores de animales domésticos, guarderías de tránsito para animales domésticos y cementerio de animales.
Concienciar a sus dueños acerca de los riesgos que las heces significan para la salud. Cooperativización para la integración social formal de los recolectores informales de basuras (“cartoneros). Promoción de una empresa social entre los recolectores adultos, reformulando suactividad económica de modo de hacer posible el aumento de sus ingresos y facilitarles renunciar al trabajo de los hijos menores. Capacitación para los padres y acciones de sostén a la familia. Dignificación del reciclado y concientización de la ciudadanía. Se promoverá la instalación de plantas de Reciclado con la tecnología necesaria para realizar en condiciones de salubridad la clasificación de los materiales. Se promoverá la separación en origen de los residuos.
Gestión de saneamiento total de basurales y en forma inmediata en aquellos que ocupan lugares públicos. Recuperación de los terrenos con forestación, limpieza, nivelación, cercado, etc. y darlos en comodato para su uso comunitario por entidades intermedias.
Hábitat y Vivienda
Una ciudad sin tramas de exclusión social
Promover la equidad en la distribución de oportunidades vitales, condiciones económicas, espacios de desarrollo material, cultural y simbólico.
Plan Estratégico consensuado y un Plan Urbano Ambiental legitimado por la ciudadanía nos permitirán lograr un modelo de desarrollo urbano equilibrado con alta calidad ambiental para la zona sur.
Generar convenios con la Provincia de Buenos Aires, a efecto de utilizar parte de su territorio para la construcción de viviendas, sobre todo en el primer cordón del G.B.A.
Establecer una normativa mediante la cual se puedan cambiar inmuebles ociosos por tierras o viceversa.
Generar la activa participación del privado para que, con una política de compromiso privadopúblico, se pueda comenzar a resolver el problema de la vivienda.
Beneficiar con créditos a la demanda y no a la oferta.
Subsidiar la vivienda social, para favorecer a aquellas familias que están el la indigencia.
Encarar un programa de construcción de infraestructura que permita modificar, cambiar y/o ampliar las redes de cloacas, agua potable, alcantarillado. Del mismo modo hacer que los entes reguladores de servicios obliguen a las empresas a reconvertir sus instalaciones.
Generar un pan definitivo para perfeccionar los dominios de las tierras en las que se encuentren asentadas, pasado a titularizar a sus actuales ocupantes, del mismo modo encarar definitivamente la escrituración de los conjuntos urbanos que al dìa de la fecha todavía se encuentran bajo el dominio del I.V.C.
Plan de transporte y tránsito que acerque estos barrios al resto de la ciudad, para ello es necesario que el Gobierno de la Ciudad tenga el control del mismo.
Un Código de Vivienda que contemple legislación especial para las viviendas del tipo transitorias que servirán para alojar a las familias mientras se construyen las definitivas. Flexibilización del Código de Planeamiento Urbano para tomar en cuenta la transitoriedad de determinadas construcciones.
Urbanizar total o parcialmente las villas de emergencia y núcleos habitacionales transitorios (NHT), aplicando el criterio selectivo para cada caso. Estas premisas y sus acciones deben llevarse a cabo en el marco de un plan integral, cuyas propuestas serán elaboradas por profesionales interdisciplinarios que contemplen, el desarrollo humano, económico y social, junto con el planeamiento urbano ambiental.
Integrar a los habitantes de las villas, en cooperativas de construcción o formar parte de las empresas constructoras. Padrón de adjudicatarios con un estricto control por parte del GCBA. Definir un menú de opciones de relocalización voluntaria para todos los habitantes de villas, casas tomadas y NHT, analizando los aspectos económicos de cada situación particular. Generar en el sur, el establecimiento de fábricas limpias, no contaminantes, al efecto que la gente de esos barrios obtenga el trabajo que necesita, del mismo modo dotar de escuelas de todo tipo y especialidad, como así también salas de atención primaria y nuevos hospitales.
Refuncionalizar la Corporación del Sur y replantearse sus objetivos, modelos de acción e injerencia de acuerdo a un Plan que involucre a las demás áreas gubernamentales y sobre todo con la participación de la ciudadanía.
Revitalización de la zona sur, con planes de sector de rehabilitación, renovación y ordenamiento urbano integral y el desarrollo sustentable y medio ambiental, mediante la planificación participativa ciudadana dentro de un marco estratégico regional. Promover el área sur de la ciudad contemplando proyectos de vivienda y actividad productiva limpia, con beneficios impositivos, baja de impuestos, aporte de tierras fiscales en desuso y derechos por tiempo determinado a las inversiones y emprendimientos.
Reforma Política, Autonomía y Descentralización

Defensa de las instituciones, la democracia y el sistema republicano.
La participación política de los individuos y los grupos hace al ideario comunitario, transforma el sistema democrático, y le da otro dinamismo a una sociedad. El Estado debe ser capaz de generar los canales y multiplicar los puntos de acceso necesarios para contener las diversas formas de participación que se expresan en la comunidad.
Planteamos la profundización de los aspectos participativos consagrados constitucionalmente.
Así, el presupuesto participativo, la consulta popular y la organización en comunas deberán responder a criterios amplios de descentralización y participación democrática.
Es necesaria una reforma política integral que garantice una alta calidad de la representación política. Vecinos de la ciudad representados por sus representantes.
Autonomía .
Impulsar la derogación de la Ley Nacional 24588 (Ley de Garantías o Cafiero), que restringe la autonomía de la Ciudad de Buenos Aires impidiendo una verdadera y eficiente gestión (puerto de Buenos Aires, transporte público, subterráneos, policía, justicia, etc.).
Ley de Coparticipación Federal en base a una única base coparticipable que reemplace el actual régimen de coparticipación y los diversos programas de transferencia de recursos existentes.
Comunas, Descentralización y Reforma política
Las comunas deben ser punta de lanza para la participación popular, la promoción de cada barrio y el avance en la resolución de la inequidad territorial actualmente existente en la ciudad.
Las comunas no deberán ser oficinas administrativas que no aseguren la participación del vecino, ni tengan en cuenta el conjunto de la Ciudad. Tampoco deberán duplicarse estructuras existentes y crear cargos sólo para saciar las apetencias de algunos partidos y dirigentes políticos, aumentando el gasto y el peso burocrático sin lograr una mejora en la gestión del gobierno comunal. La esencia de nuestra propuesta de comunas es revertir el quiebre de representación política que hoy sufren los ciudadanos y usar las mismas como instrumento para una mejor administración del dinero público, un mayor control y una creciente participación de los vecinos. También son un elemento clave para ir igualando hacia arriba las diferencias entre el norte y el sur de la ciudad y hacia adentro de cada barrio.
La construcción de un nuevo espacio institucional ordenador debe sostenerse sobre un andamiaje pluralista donde todas las fuerzas encuentren el ámbito de debate adecuado para llegar a los consensos necesarios de los cuales surgirá una propuesta que aleje definitivamente el fantasma del corporativismo político o el autoritarismo institucional y que se funde en el pluralismo, la autonomía y la alternancia. Urgente llamado a elección en las comunas. Proponemos que las sedes se ubiquen en los
centros naturales de actividad, tránsito y reunión de cada uno de los barrios. La participación ciudadana como uno de los pilares del sostén de la democracia dispuesta a defender sus derechos y cumpliendo sus obligaciones.
Ampliar el Presupuesto Participativo. Este mismo mecanismo podrá ser utilizado para lacanalización de reclamos e inquietudes.
Legislación que establezca un marco jurídico estable, que instrumente la transparencia en el cumplimiento y arbitrio de todos los mecanismos de control y participación en beneficio del bien común.
Un gobierno transparente, socialmente responsable, honesto y representativo de los intereses colectivos e individuales. Dando el ejemplo de arriba hacia abajo, que cambie la cultura de la corrupción, del facilismo e indiferencia.
Verdadera y definitiva implementación del “Plan Estratégico Consensuado”, que proyecta a futuro los planes de las diferentes áreas de la ciudad.
Integración con el área metropolitana, para dar solución al manejo de los problemas de las cuencas hídricas (saneamiento integral del Riachuelo), de transporte, de jurisdicción, de obras y servicios.
Fortalecimiento de las relaciones entre el Gobierno y las ONG's para ayudar a una mejor convivencia que recompone el tejido social y fortalece la democracia y sus instituciones.
Garantizar igualitariamente el acceso a la información a los ciudadanos.
Aprovechamiento de la tecnología para transparentar procesos electorales. Un Código Electoral que incluya el voto electrónico para un mejor sistema de representación en el cual no existan mecanismos que limiten el poder de decisión de los votantes.
Limitar con topes muy estrictos los aportes privados a los partidos –tanto para campañas como para el funcionamiento permanente-, permitiendo sólo aquellos provenientes de personas físicas y no de empresas, sociedades o fundaciones. En este sentido proponemos sancionar las leyes y modificaciones necesarias a la Ley de Partidos Políticos e incluir estos criterios en el futuro Código Electoral de la Ciudad.
Democratizar y descentralizar el poder concebido como una herramienta política.
Reconvertir el poder en un instrumento social para que las minorías, los grupos étnicos o religiosos, los jóvenes, los desocupados, los estudiantes, los defensores de los recursos naturales, los mayores, la sociedad toda – y cada ciudadano en particular – lo pueda utilizar como un recurso al servicio de sus necesidades.
Gestión Pública
Un estado transparente, eficaz y al servicio de todos

Profesionalización de la administración pública y concursos públicos para ingresar al Estado y para los ascensos y los despidos serán sustentados en evaluaciones de resultados.
Proponemos el sistema de mérito como nuevo paradigma para los recursos humanos del Estado: solo vale la capacitación y la aptitud para el trabajo.
Deberán efectuarse concursos limpios, transparentes y abiertos para todos los cargos. Resulta imprescindible un sistema de premios y castigos para la función pública. La reforma que proponemos busca revalorizar al empleado público: de hecho, los niveles más bajos del escalafón jerárquico, que en general son aquellos trabajadores sobre los que recae el grueso de las tareas y la peor –e injusta muchas veces- consideración social, son los que con mayor seguridad seguirán en sus puestos de trabajo tras la aplicación del sistema de mérito, ya que su experiencia les dará el puntaje necesario para obtener sus puestos en un concurso limpio que podrán ganar dignamente.
Ley de Ministerios - Reforma de Estructuras Jerárquicas: Hay que simplificar las estructuras, eliminar las líneas medias sin función y crear más unidades que tengan áreas específicas y bien delimitadas de acción y responsabilidad. Si hablamos de eficacia y transparencia no es posible continuar con múltiples áreas que cumplen idéntica función, superposición de tareas y dilución de responsabilidades. El gobierno debe tener capacidad de gestión, combinada con agilidad y flexibilidad en sus estructuras. Sistema de Habilitaciones y Control: Hoy la normativa de habilitaciones es engorrosa y oscura. Proponemos simplificar y unificar la misma bajo normas de habilitaciones más claras, transparentes y sencillas que promoverán una mayor actividad comercial y que serán más fáciles de controlar, mientras que a la vez pondrán un límite claro a la corrupción y arbitrariedad en que puedan incurrir los inspectores.
Proponemos también una “entanilla única” de forma tal que el comerciante, profesional o ciudadano que tenga que realizar algún trámite de habilitación ante el Gobierno de la Ciudad pueda dirigirse a una sola oficina, logrando así la simplificación del mismo y la centralización de la información, con posibilidad de iniciar el trámite por internet a modo de declaración jurada, evitando demoras. Deberá darse publicidad en Internet y en las futuras Comunas los comercios y/o instalaciones verificadas o inspeccionadas. En tal sentido debe adecuarse el Código de Habilitaciones y demás normas supletorias. Asimismo, el control de la actividad comercial deberá descentralizarse, y así poner el eje en la participación ciudadana. Al reducirse el área a verificar y/o inspeccionar se lograrán mayores niveles de eficacia, eficiencia, transparencia y seguridad en el control comunal.

Reforma Estructural de los Organismos de Control: El control hace a la esencia de la República, y sin él la misma se ve cualitativamente degradada y por esto son necesarios organismos de control independientes. También deberá reorientarse el modo de trabajo, no limitándose a cuestiones financieras y tendiendo a un control más integral de la gestión. Sus empleados deben ser elegidos por concursos transparentes, en función de su idoneidad e independencia de los partidos y los gobiernos de turno. Asimismo los diversos Organismos deben coordinarse y no superponer sus tareas para no diluir la capacidad de contralor.
Proponemos legislar sobre la revisión de la Ley 210 que reglamenta el Ente Único Regular de Servicios Públicos de la Ciudad, ampliando sus competencias a todos los servicios públicos que la ciudad tercerice o concesione.
Construir una pirámide de valores que se encarnen en la dirigencia, los funcionarios y se arraiguen en toda la sociedad, desestructurando todos y cada uno de los estamentos donde la corrupción ha anidado sus embriones.
Programa Modelo de Lucha Frontal contra la Corrupción, con fuertes mecanismos de control y auditorias (internas y externas).
Correcta administración de los recursos sociales con licitaciones y convocatorias transparentes que sean accesibles a todos y controlables por todos.
Publicación en Internet de todos los llamados a licitación, entrega gratuita de los pliegos de condiciones a fin de aumentar la competencia y de permitir la participación de las Pymes.
Tratamiento integrado de todos los sistemas de gestión en la ciudad de Buenos Aires (egovernment).
Publicación del patrimonio de los funcionarios en una base de datos accesible al vecino, que facilite la investigación del enriquecimiento ilícito.
Simplificación de las normas de edificación, prohibición de las excepciones y aprobación directa por los profesionales del particular, bajo severas responsabilidades, con registro por Internet. Denuncias de ciudadanos particulares por Internet, con posibilidad de seguimiento anónimo del trámite que permita a los denunciantes conocer el resultado de su acción.
Audiencias públicas para la adjudicación de todas las concesiones de la Ciudad y el cumplimiento estricto de los plazos contractuales, evitando renovaciones automáticas.
Publicación en Internet de las resoluciones de las diversas áreas de gobierno, clasificadas por materia y obligación de seguir el precedente.
Base única de datos para el control del personal, accesible al público y mejor control de cumplimiento de tareas mediante modernos sistemas.
Presupuesto con responsabilidad fiscal para la transparencia en la administración pública. Transparentar la información de gestión. (Ej. Inventario, Bases de datos de RR.HH, Presupuesto, entre otros)

Seguridad Ciudadana
El aumento de la inseguridad y la ausencia de justicia son una muestra más del proceso de degradación y desarticulación en que el Estado está inmerso. La impunidad y el miedo pervierten a la sociedad democrática. Brindar seguridad es una obligación indelegable del Estado.
Todo esto nos lleva a la búsqueda de una sociedad en dónde exista orden, pero no el orden entendido como forma de encubrir la represión estatal, sino como dimensión del Contrato Moral que asegure la inclusión, la justicia, la convivencia en paz y el respeto por el otro. Es por ello que queremos una Buenos Aires con verdadera autonomía, y es por eso que planteamos una ciudad con su propia policía.
La creación de un cuerpo de policía de la Ciudad de Buenos Aires, constituye un hito fundamental en el avance hacia la plena autonomía que nuestra ciudad se merece. Es además una herramienta indispensable con la que debe contar el Jefe de Gobierno para garantizar el eficiente manejo de la seguridad pública y otras cuestiones, como el control de tránsito.
Así es pertinente modificar o derogar varios artículos de la Ley Orgánica de la Policía Federal Argentina que autoriza a la misma Policía a controlar el tránsito y a labrar actas de comprobación de infracciones en la Ciudad y la Ley Nº 24.588, de Garantías de los Intereses del Gobierno Federal en la Ciudad de Buenos Aires mientras sea Capital de la Nación.
Las nuevas modalidades delictivas, mayor violencia, crecimiento de la exclusión social y narcotráfico, han agravado y modificado la geografía delictiva. Por esto nuestros lineamientos estratégicos apuntan a una ciudad que no sea tierra de nadie y en la que sus autoridades velen por la seguridad de todos. Con una policía fortificada institucionalmente, eficiente y tecnificada para la prevención del delito y un control efectivo sobre las agencias y personal de seguridad privada.
La temática de seguridad, eje hoy de ásperas disputas, esta signado en su dimensión por cuestiones históricas, ideológicas y culturales de evidente sesgo político partidario, redimiendo su dialéctica a una confrontación que no refleja el verdadero propósito de una reforma.
El histórico debate entre garantismo y mano dura, de evidente impacto mediático, expone a losactores sociales a un contexto reduccioncita, no dando respuesta a un sinnúmero de interrogantes relacionados con la seguridad y la administración de justicia.
Es necesaria la reformulación de políticas públicas que exhiban una armónica y actualizada conjunción de valores, que lejos de estar en crisis, deben y deberán ser fortalecidos: la libertad del ciudadano y su seguridad, de modo tal que ninguno de ellos sea sacrificado en aras del otro, trascendiendo su aparente antagonismo.
En estrecha relación a esta temática, el sistema judicial y su administración, deberán adaptarse a la nueva realidad social; en la agenda de los actores involucrados temas como diseño de políticas de prevención, reestructuración del servicio penitenciario, establecimiento de sistemas de control y seguimiento en los procesos penales con apoyo informático, modificación de los regímenes procedimentales, adaptación de la nueva normativa a pactos internacionales, medidas alternativas de prisión y detención preventiva, mecanismos alternativos de conciliación, traspaso de la policía federal a la órbita de la Ciudad de Buenos Aires, con presupuesto propio, deberán inscribirse como puntos centrales de una eventual reforma Las fuerzas policiales deberán insertarse en la búsqueda de una sociedad donde exista el orden, pero no entendido como forma de cubrir la represión estatal, sino como dimensión del contrato moral que asegure su inclusión, la justicia la convivencia en paz y el respeto por el otro. Creación de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. Reclamar al Congreso Nacional la derogación de artículo 7º de la Ley 24588 (Ley Cafiero) Con el vigilante de la esquina. El policía de la cuadra será conocido por nombre y apellido por todos los vecinos, caminará siempre el mismo barrio.
Política de prevención, controlando las conductas predelictuales, pero advertiremos que el que las hace las paga.
Una ciudad sin zonas liberadas. La policía no va a mirar para otro lado cuando vendan drogas cerca de los colegios.
Nuevas comisarías en Barracas, Mataderos, Liniers, Villa Riachuelo, Flores Sur, Villa Luro, Parque Chas y Chacarita.
Configurar un gobierno que gestione la política de seguridad, que termine con la impunidad y la
indiferencia estatal, porque éstas son las prioridades de la gente.
Operar con un mapa del delito con sistemas informáticos de acceso público.
Organizar controles efectivos de seguridad contra todo riesgo en edificios, locales, plantas industriales (públicos y particulares), mediante una unidad multisectorial de control y emergencia urbana.
Proceder con el cumplimiento estricto del código contravencional.
Sostener con fiscalías zonales y/o barriales (de contravención, instrucción, mediación, etc.) con amplia disponibilidad funcional y horaria en zonas críticas.
Publicar periódicamente las nóminas de responsables policiales por zona accesibles al ciudadano.
Mediante una auditoria externa se controlará los procedimientos policiales, de conducta y honestidad de la policía.
Se modernizara el equipamiento policial con cámaras filmadoras en las calles, avenidas y estaciones de trenes.
Control satelital de zonas de la ciudad “en línea” y “en tiempo real” para usos múltiples Confección de un mapa del delito.
Creación de un Foro Comunitario de Control Ciudadano de la policía. El vecino de Buenos Aires debe contar con la posibilidad de hacer denuncias por mal desempeño de la Policía a un nivel externo y ajeno al gobierno y a la fuerza, a los fines de que estas denuncias no se desvirtúen y puedan utilizarse como una herramienta de protección de los derechos de los habitantes y control sobre la Policía.
Jerarquizar el personal a través de su profesionalización. Formación y capacitación permanente del personal policial afectado a la seguridad para lograr una mejor y más eficaz prestación del servicio.
Selección de Agentes. Las designaciones en los cargos deben estar exentas de todo manejo político o partidario, haciéndose por cánones de excelencia y aptitud para las tareas. Se deberá especificar las capacidades mínimas requeridas –tanto profesionales como psicofísicas- y establecerse cual será el procedimiento de selección o ascenso, el cual deberá realizarse por concursos públicos y abiertos, contando con un jurado independiente y respetando las reglas del sistema de mérito con las particularidades propias de una fuerza se seguridad.
Restauración del principio de autoridad, sobre la base del consenso, que legitime el accionar de todas las instituciones que tienen responsabilidades en la problemática de la seguridad. La recomposición del concepto de autoridad no sólo será formal sino, esencialmente, ética, por lo cual promoveremos las reformas estructurales, legales y funcionales que sean necesarias sin perder de vista que la calidad de vida del país esta unida a la de su justicia Las reformas estructurales generarán orden y seguridad para la convivencia lo que permitirá que la seguridad pública se mantenga en todos los niveles; no solo en la ley sino esencialmente en las acciones que deba llevar adelante el Estado para restaurar la fe pública en las instituciones encargadas de su ejecución.
Las reformas legales generarán las herramientas para que los organismos encargados de hacer cumplir la ley tengan los elementos necesarios para otorgarle certeza a las conductas.
Aspiramos a un Estado que plantee reglas claras para otorgar una razonable protección con quien cumple con la ley pero a la vez una implacable y contundente respuesta con quienes se aparten de ella.
En cuanto a las reformas funcionales, estas tienden a establecer una lucha abierta contra la delincuencia; una cruzada contra los que no valoran la vida y la propiedad ajenas, utilizando todos los medios disponibles por el Estado. La vida de los integrantes de las fuerzas de seguridad será un valor cuidado por todos y la vida de cada uno de los habitantes cuidada por los integrantes de las fuerzas de seguridad y el esfuerzo mancomunado de todas las organizaciones del Estado
Justicia

El reestablecimiento de una justicia independiente y confiable, donde se asegure un fácil acceso y una rápida y equitativa administración de la justicia, y se promueva la estricta aplicación de la ley.
Sólidas instituciones respetadas y respetables, con un profundo apego a la ley como requisito mínimo para generar confianza y coexistencia creadora.
Cumplimiento al convenio de transferencia progresiva de competencias de la justicia nacional ordinaria a la órbita de la ciudad de Buenos Aires. Elaboración de un plan estratégico para la transferencia y el ordenamiento de justicia a la Ciudad Autónoma, involucrando a los actores sociales y profesionales que forman parte de la misma, tanto a nivel de las instituciones autónomas, como de las instituciones nacionales y federales.
Promover la participación ciudadana en la formulación, planificación, y seguimiento de la ejecución, evaluación, y perfeccionamiento del Presupuesto Anual del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de la Ciudad de Buenos Aires, contribuyendo en la definición de políticas judiciales, proponiendo prioridades en la asignación de los recursos e inversión publica a corto, mediano y largo plazo. Fijar metas presupuestarias.
Diseñar estándares de calidad de justicia que involucren su calidad, su mejora edilicia, la capacitación de una Escuela Judicial Moderna, una cultura de gestión adecuada y un contacto ciudadano a través de las autoridades descentralizadas de la Ciudad de Buenos Aires.
Real independencia al Poder Judicial de la Ciudad de Buenos Aires. La implementación de un Poder Autónomo, no sometido a las necesidades políticas del ejecutivo de turno, en donde se tendrán en cuenta los derechos del ciudadano y no las componendas de los poderes corporativos
Por una Justicia administrada utilizando técnicas modernas en sus sistematización, erradicando métodos arcaicos que atentan contra su funcionamiento, debiendo reformular y modificar códigos de procedimientos, adaptándolos a la nueva realidad jurídica.
Justicia concebida como servicio al ciudadano que funcione durante todo el año, en un horario que deberá responder a las nuevas necesidades de la vida urbana. El servicio de Justicia de la Ciudad debe estar disponible para los ciudadanos los 365 días del año. Las necesidades de descanso y recreación de letrados y funcionarios judiciales pueden suplirse sin la necesidad de paralizar la actividad judicial durante un mes y medio al año, al igual que sucede en todas las demás actividades publicas y privadas. España ha realizado con éxito esta reforma.
La actividad de los mal llamados jueces administrativos deberá ser transferida al Poder Judicial de la Ciudad, dentro del fuero Contravencional y de Faltas.
El eje fundamental de estas propuestas no es otro que reemplazar el actual paradigma en cuanto a la relación entre el Estado y el ciudadano basado en la superioridad del primero por un nuevo paradigma basado en la igualdad de las partes en materia administrativa.
Reglamentación del requisito de idoneidad, que tiene categoría constitucional, para ocupar cargos en el Poder Judicial.
Implementación orgánica de la Carrera Judicial, que deberá sustituir el régimen actual de selección de cargos donde prima la politización y el clientelismo. Sistema de premios y castigos para la función pública. La Reforma que se propone busca reivindicar y revalorizar el genuino concepto de empleado público, aquel que se ubica en los niveles mas bajos del escalafón jerárquico, en el que recaen en grueso de las tareas y el que cuenta con menor consideración social.
Adecuación del presupuesto a asignar al Poder Judicial en concordancia con el sistema de Administración de Justicia que permita su independiente desenvolvimiento. Reducción de alícuota de tasa judicial del 3% al 1%.
Implementación y perfeccionamiento de los métodos alternativos de resolución de conflictos, activando y generando espacios que acentúen y acrecienten la relación ciudadano justicia. Ley de Mediación en la Ciudad de Buenos Aires.
Implementación de la Justicia Vecinal. Creación de los Tribunales de Vecindad para la cuestiones de menor cuantía, medianera, cuestiones relativas a la propiedad horizontal, cuestiones civiles y comerciales hasta el monto que la ley establezca, prevención en materia de violencia familiar y protección de personas.
Compromiso efectivo de no proponer reforma alguna a la actual composición del Consejo de la Magistratura y de otorgar superpoderes al Ejecutivo.
Ley de Ministerios. Reforma de Estructuras Jerárquicas. Eliminar líneas medias sin función y crear más unidades que tenga áreas especificas y bien delimitadas de acción y responsabilidad.
Racionalización y eficiencia en el ámbito de la Administración del Poder Judicial de la Ciudad Autónoma de la Ciudad de Buenos Aire.
Por una reformulación del sistema carcelario, por una clara y definida asignación de recursos, en un verdadero proceso de resocialización y pedagogía a los reclusos.